Cuando suceden acontecimientos aterradores en el hogar, la escuela o la comunidad de un niño, su sensación de seguridad y estabilidad se quebranta. Los niños acuden a sus padres y a otros adultos de confianza en busca de seguridad y tranquilidad cuando se producen accidentes, delitos violentos, catástrofes naturales u otros acontecimientos traumáticos.
Los acontecimientos violentos, sobre todo los tiroteos, pueden dejar a un niño indefenso, vulnerable o traumatizado. Ya sea que el acontecimiento ocurra en su comunidad, estado, dentro o fuera del país, el niño puede sentir emociones intensas y confusas.
Especialmente en momentos atemorizantes, es esencial crear un espacio seguro en el que su hijo se sienta escuchado y comprendido. Si bien el impacto emocional de un acontecimiento trágico depende de la personalidad del niño, las experiencias pasadas, las circunstancias sociales y económicas, y la disponibilidad de recursos locales, todos los niños necesitan apoyo para procesar acontecimientos aterradores.
Siga estos consejos de salud mental de nuestro equipo para contener a su hijo pequeño o adolescente al momento de enfrentar una tragedia.
Limite la exposición a los medios de comunicación
No podemos controlar lo que sucede en las noticias, pero sí tenemos control sobre la frecuencia con la que accedemos. Limite la exposición de su hijo a los medios de comunicación aterradores y, si puede, evite que su hijo mire las noticias sin su presencia o la de otro adulto de confianza. Sabemos que esto puede ser poco realista hoy en día, sobre todo con el uso generalizado de TikTok, Twitch, Instagram y otras plataformas de redes sociales. Si su hijo ya se ha enterado del acontecimiento, pregúntele: “¿Qué has oído y cómo te sientes?”.
Esté al tanto de cómo se siente su hijo, hable con franqueza y responda preguntas
Es posible que su hijo y sus amigos hayan hablado del acontecimiento, o que haya visto noticias del acontecimiento en las redes sociales. Quizás su hijo esté rumiando, pensando en la tragedia. Trate de animar a su hijo a hablar de lo que siente. Podría ser útil fijar una hora para ponerse al día, como la cena o la hora de acostarse. Permítale que haga preguntas y haga todo lo posible para responder con franqueza. Las conversaciones con su hijo son una oportunidad para desacreditar mitos o conceptos erróneos. Hable con su hijo sobre los hechos.
Enséñele a canalizar positivamente mediante el arte, el juego y el movimiento
El arte, el juego creativo y el ejercicio son formas fantásticas para que los niños de todas las edades procesen sus sentimientos y lidien con sus emociones. En el caso de los niños pequeños, especialmente aquellos que tienen dificultades para expresarse a través de las palabras, el arte y la música pueden fomentar la expresión. El juego, el arte y el movimiento ayudan a los niños a dar sentido al mundo que los rodea a su propia manera.
Recuérdele a su hijo la existencia de los voluntarios
Hable con su hijo acerca de las personas de nuestras comunidades que nos protegen. Bomberos, médicos, enfermeros, maestros, representantes de religiones, policías, etc. Como dijo Fred Rogers: “Cuando suceda algo aterrador, ve en busca de voluntarios. Siempre encontrarás personas que querrán ayudarte”. Haga hincapié en el trabajo de los voluntarios para que su hijo pueda sentir pertenencia en su comunidad y seguridad.
Además de ir en busca de voluntarios, también puede ser uno de ellos. La toma de medidas positivas puede ayudar a que su hijo se sienta parte. Hacer algo con el fin ayudar a otros puede ser muy terapéutico para los niños y ayudarlos a sentir que están marcando una diferencia significativa.
Cuídese a sí mismo
Cuando ocurre una tragedia, puede ser difícil manejar sus propias emociones, y más aún contener a su hijo. Si usted se muestra sensible, su hijo podría notarlo y ponerse sensible también. Si puede, intente mostrar calma. Recuerde que los niños captan las pequeñas señales y siempre están escuchando, así que sea consciente de cómo habla del acontecimiento con otros adultos si su hijo está presente.
Busque apoyo
Si su hijo tiene dificultades con las actividades cotidianas o sus relaciones con la familia y sus compañeros, considere hablar con un profesional. Un profesional de salud mental puede ayudar a su hijo a procesar sus sentimientos y desarrollar herramientas de afrontamiento.

Aunque no puede proteger completamente a sus hijos de las noticias aterradoras, puede ayudarlos a procesar las noticias de manera saludable. Puede brindar tranquilidad y un espacio para tener una conversación franca y comprensiva.