Volver a la escuela después de las vacaciones puede ser difícil para muchos estudiantes, dado que deben restablecer sus rutinas, prepararse para la segunda mitad del año escolar y procesar las emociones o preocupaciones que surgieron durante el receso.
Si bien los estudiantes de todas las edades pueden enfrentarse a problemas de salud mental en cualquier momento durante su recorrido de K-12, los desafíos suelen variar según la edad. Los estudiantes más jóvenes pueden tener problemas de ansiedad por separación o de rechazo escolar, por lo que volver puede resultarles realmente difícil. Los estudiantes mayores suelen tener problemas de falta de motivación, ansiedad social o estrés académico.
Para todos los estudiantes, la constancia es clave. Para volver a la escuela es necesario restablecer las rutinas, volver a conectarse con los compañeros, revisar las metas académicas y personales y readaptarse a las expectativas de los profesores.
En este blog, se analizan algunas de las dificultades socioemocionales que podrían tener los estudiantes al volver a la escuela después de un receso largo y se explica cómo la teleterapia ayuda a los estudiantes.
El rol de la teleterapia como ayuda para los estudiantes
Ofrecer atención de salud mental es una herramienta que las escuelas pueden adoptar para abordar el ausentismo crónico y el rechazo escolar. La teleterapia ayuda a los estudiantes de todas las edades a procesar las emociones. Se les brinda un espacio seguro para hablar de sus sentimientos y estrategias de afrontamiento eficaces para gestionar sus emociones y factores de estrés. Con la ayuda de un terapeuta, los alumnos identifican y aprenden a trabajar las emociones que influyen en el rechazo escolar y el ausentismo crónico.
Además, es posible que los estudiantes que se hayan sentido solos o aislados hayan afrontado conflictos familiares durante las vacaciones. Puede ser difícil para los estudiantes procesar esas emociones por su cuenta. A través de las conversaciones con sus terapeutas, los estudiantes pueden comenzar a comprender sus emociones, ya sea la ansiedad por volver a la escuela o el procesamiento de un acontecimiento familiar traumático que se haya producido en casa.
Rechazo escolar y ausentismo crónico
El rechazo escolar es una conducta extrema por la que se evita la escuela. Existen varios factores que provocan el rechazo escolar. Entre las causas comunes se incluyen las siguientes:
- Ansiedad y miedo por el entorno escolar.
- Ansiedad social, dificultad para hacer amigos, rechazo social o acoso escolar.
- Desafíos académicos, dificultades de aprendizaje o demasiada presión académica.
- Problemas en el hogar o dinámica familiar.
- Problemas de salud mental, como depresión o trastorno de ansiedad.
- Eventos traumáticos como la pérdida de un ser querido, abuso o cambios significativos en la vida.
Los períodos de transición, como la vuelta a la escuela después de las vacaciones, pueden desencadenar el rechazo escolar. Algunos estudiantes afirman sufrir dolores de cabeza o de estómago para no ir a la escuela. El exceso de ausencias no justificadas por enfermedad puede ser un indicio de que el estudiante utiliza excusas para faltar a clase o de que sufre estrés y ansiedad.
El rechazo constante y prolongado puede provocar un ausentismo crónico. El ausentismo crónico es una preocupación creciente que afecta a más del 20 o 30% de los estudiantes. Se considera ausentismo crónico cuando los estudiantes faltan 15 días o más durante el año escolar.
El ausentismo crónico dificulta de forma significativa el progreso académico y el bienestar general de un estudiante. Puede ocasionar un bajo rendimiento académico, lagunas en el aprendizaje y dificultades para mantener relaciones sanas con los compañeros. Un estudiante con ausentismo crónico es más propenso a abandonar los estudios, lo que repercute en sus oportunidades educativas y profesionales futuras. El impacto negativo del ausentismo crónico afecta no solo al estudiante, sino también a la unidad familiar, la comunidad escolar y el sistema educativo.
Ansiedad social
Mientras que algunos estudiantes florecen en sociedad, otros tienen dificultades de ansiedad social. Los estudiantes con ansiedad social podrían tener miedo a que los juzguen y evitar proyectos o actividades en grupo. En casos graves, un estudiante con ansiedad social podría tener síntomas físicos, como el aumento de la frecuencia cardíaca en situaciones sociales. La ansiedad social crónica puede provocar que los alumnos eviten la escuela, duden en participar en los debates de clase o, en casos graves, puede provocar el ausentismo crónico.
La teleterapia brinda a los estudiantes con ansiedad social un espacio seguro para expresar sus emociones, desarrollar mecanismos y herramientas de afrontamiento y desarrollar su confianza. Los terapeutas proveen estrategias a los estudiantes para manejar situaciones sociales con comodidad.
Cómo ayudan los terapeutas de Hazel a los estudiantes a superar la ansiedad
“Desde el comienzo del programa, el estudiante perdió un solo día de clases debido a una enfermedad física, no a la ansiedad. Informaron la aplicación de técnicas como 'pensamientos irracionales desafiantes' para superar la ansiedad. Se motiva al estudiante a superar los desafíos poniendo en práctica las habilidades en las que trabajamos juntos” - Terapeuta de Hazel Health.
Estrés académico
Los estudiantes suelen sentir mucho estrés debido a las expectativas académicas. La vuelta a la escuela después de las vacaciones puede ser difícil para los estudiantes que tuvieron dificultades académicas durante el primer semestre o para los que sufren presión debido a su desempeño académico. El estrés académico puede ser tanto intrínseco como extrínseco.
Volver a la escuela después de un descanso podría ser difícil para los siguientes estudiantes:
- Aquellos que no cumplieron sus metas académicas antes del receso.
- Aquellos que asistirán a clases nuevas y se están ajustando a las nuevas expectativas.
- Aquellos que luchan contra las lagunas académicas.
El estrés académico se puede manifestar de varias maneras, entre ellas: trastornos del sueño, dificultad para concentrarse y agobio. Para algunos estudiantes, el miedo al fracaso puede ser paralizante y les impide desarrollar todo su potencial o incluso asistir a la escuela en primer lugar.
A través de la teleterapia, los estudiantes aprenden técnicas de manejo del estrés, como la respiración profunda. Los terapeutas enseñan a gestionar el tiempo y a buscar apoyo académico cuando es necesario, y ayudan a los estudiantes a comprender la importancia de encontrar un equilibrio entre las actividades académicas y el bienestar personal.
La importancia de la rutina
Las vacaciones cambian las rutinas habituales de los estudiantes y reestablecerlas en la segunda mitad del curso escolar puede resultar difícil. Una rutina saludable debe incluir la relajación antes de acostarse, rutinas matutinas y hábitos alimentarios saludables.
La teleterapia ayuda a los estudiantes y a sus familias a establecer rutinas saludables. Los terapeutas dialogan con los estudiantes y los ayudan a comprender la importancia de la constancia, a fin de que comprendan la relación entre los hábitos saludables y su salud mental.
Los terapeutas suelen sugerir que los padres y maestros incorporen cronogramas visuales durante el día para sus hijos o estudiantes pequeños. Los cronogramas visuales permiten que los estudiantes más jóvenes los sigan durante el día para saber qué hacer a continuación.

Establecimiento de metas y expectativas saludables
Los alumnos de todas las edades se benefician de la fijación de metas y de la comprensión de las expectativas. Al margen de los logros académicos, se debe animar a los estudiantes a reflexionar sobre su crecimiento personal y sus aspiraciones. El debate sobre las metas puede desarrollar el sentido de la responsabilidad y lograr que los estudiantes “sientan que controlan su aprendizaje”.
Durante la teleterapia, los estudiantes trabajan con su terapeuta para establecer metas, revisarlas y celebrar cada pequeña victoria mientras se ajustan las expectativas según sea necesario. ¡Fijar metas en la rutina del estudiante genera confianza y resiliencia!
Cómo facilitar la vuelta a la escuela después de un largo descanso
La vuelta a la escuela después de las vacaciones de invierno exige un enfoque reflexivo sobre el bienestar mental de los estudiantes. Tanto la ansiedad por separación como el estrés académico son desafíos que afectan tanto a los estudiantes más jóvenes como a los mayores, y que repercuten en su recorrido académico y en su desarrollo personal.
La constancia en las rutinas y la utilización de la teleterapia son estrategias que pueden ayudar. La teleterapia ofrece un espacio seguro para que los estudiantes expresen emociones, desarrollen mecanismos de afrontamiento y charlen sobre las complejidades de la vida escolar, mientras se aborda el ausentismo crónico y se fomenta la resiliencia.
Al tratar la ansiedad social, el estrés académico y los trastornos posteriores a las vacaciones, la teleterapia ayuda a los estudiantes a gestionar sus emociones. Mediante la priorización de la rutina, la fijación de metas y las expectativas saludables se garantiza el éxito académico a la vez que se fomenta la sensación de control.
¿Su hijo o hija tiene problemas para volver a la escuela tras las vacaciones? Obtenga más información sobre cómo los terapeutas de Hazel ayudan a los estudiantes durante todo el año.